La banda de rock dio un concierto previo al partido entre PSG e Inter que no sentó bien con la leyenda neerlandesa
El PSG y el Inter de Milán disputaron la final de la UEFA Champions League en el Allianz Arena de Múnich. El equipo dirigido por Luis Enrique, le pasó por encima a los nerazzurri con una goleada inédita, que les dio la primera orejona de su historia.
Días después del partido, Marco van Basten, leyenda del Milan y dos veces campeón del torneo, lanzó duras críticas hacia la organización, señalando que el espectáculo previo afectó el desarrollo del juego.
Antes del inicio, la UEFA montó un show musical en el césped del Bayern Múnich con la banda de rock Linkin Park, ahora liderada por Emily Armstrong, como vocalista. El show incluyó luces, sonido y una puesta en escena que generó molestias entre algunos referentes del fútbol.
Van Basten fue uno de los primeros en alzar la voz contra esta decisión. Cuestionó que los futbolistas hayan tenido que permanecer inmóviles sobre el terreno de juego durante varios minutos antes del encuentro más importante del año.
“Los chicos se están preparando para el partido más importante de sus vidas. La UEFA ha copiado el modelo de la FIFA. Es ridículo que los distraigan de esa forma. Me parece una completa idiotez”, declaró a Ziggo Sports. “La actuación de Linkin Park fue basura, una absoluta basura. Es una vergüenza que la UEFA lo permita”.
Rafael van der Vaart, compatriota del exdelantero, respaldó sus palabras. El subcampeón del mundo también apuntó contra la interrupción previa: “Haces tu calentamiento, te preparas y luego tienes que entrar a las ocho y media. Después no haces nada durante media hora por culpa de este show”.